Presenta a dos tías buenas en el Salvaje Oeste en busca de aventura y diversión. Tropiezan con un sex shop y deciden comprar algunos juguetes sexys para jugar más tarde esa noche. Una de las chicas coge un pequeño consolador negro hecho de vidrio de borosilicato de alta calidad. Le encanta cómo se siente en la mano y no puede esperar a usarlo más tarde esa noche.