Un grupo de jóvenes estudiantes de instituto deciden grabar sus propios vídeos sexuales en la oficina del instituto durante la hora de comer. Las chicas llevan faldas y camisetas sexys que muestran sus tetas y culos, mientras que los chicos van vestidos informalmente. Una de las chicas más sexys es una rubia explosiva a la que le encanta que su novio se la folle duro. Empiezan a grabarse teniendo sexo duro en el pupitre hasta que alguien llama a la puerta. Es el director. Les pilla con las manos en la masa, pero en lugar de castigarles les ofrece ayudarles a grabar mejores vídeos si aceptan hacerlo en su despacho. La pareja acepta y empieza a follarse en diferentes posturas mientras el cámara lo graba todo desde diferentes ángulos. Finalmente la chica deja que su novio le llene el coño con su semen caliente mientras ella gime.